El trigo

En el mes de Septiembre se empieza a preparar la tierra para proceder luego a la siembra en el mes de Octubre o Noviembre. Los hombres eran normalmente los que sembraban, se colgaban una espuerta llena de trigo al hombro, con una mano mantenían abierta la espuerta y con la otra tiraban el trigo a lo que alcanzaba el brazo, una "amelga" así hasta que sembraban todo el terreno y detrás iban las yuntas arando y enterrando el trigo; si la tierra estaba seca se araba con el arado de hierro y en caso de que estuviera mojada se araba con el arado de palo.

Es en esta época en otoño cuando se procede a la siembra del trigo, pues coincide con el tiempo donde mas llueve en esta zona.

Ya queda esperar que nazca bien el trigo, cuando este esta pequeñito se le daba la primera escarda con los “escardillos”, después cuando está mas grande se le daba otra escarda, y cuando ya tiene la espiga se le da un repaso que se hace con las manos para quitarles las avenas y alpistes que son unas hierbas que si granan para el otro año dejan mucha semilla.

Llega el verano y se seca el trigo con lo que se empieza la recolección, empiezan las madrugadas de cuadrillas de hombres equipados de “zamarrón”, “ manguillas” , “deiles”, “ciñieras” y “hozes” en mano y se ponían a segar días y días y hasta meses, eran meses muy duros por las altas temperaturas y la cantidad de horas que trabajaban al día, de los pocos momentos agradables era cuando el niño acarreaba agua fresca de pozo o llegaba la hora de comer casi siempre tocino, morcilla, chorizos.. cosas de la matanza.

El segador debía ir muy bien protegido contra el sol, por eso la cabeza la llevaban muy bien protegida con el sombrero de paja y el mismo pañuelo que llevaban para la nariz se lo colgaban por detrás del sombrero para protegerse el cuello del sol.

Empezaba la siega y el trigo se hacía manojos amarrados con “ataeros” hechos del mismo trigo, es una técnica antiquísima que consiste en coger un puñado de trigo, con el mismo trigo hacen una vuelta que le dicen echar la llave, cuando ya ven que es suficiente hacen el “jace” y luego los ponen juntos a la espera de que vengan los mulos con sus angarillas para cargarlas en éstas, mas tarde inventaron las rastras, que eran muy parecidas a una carreta pero sin ruedas, en lugar de ruedas se desplazaban con dos vigas a lo largo en forma de trineo, a esta se le enganchaba una yunta y esta hiba recogiendo los montones para llevarlos a la era.

Trillado del trigo

Para preparar la “parva” había que madrugar mucho, sobre todo si no había “blandura”; se empezaba soltando los haces de trigo, se disponían los mulos para ahoyar la parva (acción que consistía en darle vueltas y mas vueltas con los mulos y el trillo a la parva). La parva se volvía lo de arriba para abajo y al contrario para que no se quedaran espigas sin trillar con el “biergo”, esto se hacía varias veces y una vez hecho esto se arrecogía la parva con un palo llamado “hornilla” que iba tirado por la yunta de mulos y con el que se hacía un montón alargado.

Aventar

La parva se aventaba con los “biergos”, los hombres echaban la paja y el grano al aire por alto y con el aire se va separando la paja del grano, luego con un rastrillo se le pasa por encima para dejarlo lo mas limpio posible y después cribarlo con las cribas, lo que va quedando es trigo limpio listo para envasar con lo que ya se envasa en los talegos o costales, se llenaban con una cuartilla que es un instrumento de medida que hace la cuarta parte de un costal

Envasar

Luego lo llevaban con los mulos a los cortijos o a las casas del pueblo y lo metían en las cámaras que eran la parte de arriba de las casas parecido a la buhardilla de una casa de hoy, aquí están las trojes donde los podían echar a granel o dejarlos envasados en los talegos.